Mauricio Leal estilista colombiano asesinado por su hermano
En la mañana del 22 de noviembre de 2021, las autoridades colombianas encontraron los cadáveres del reconocido estilista Mauricio Leal y de su madre, Marleny Hernández, en el hogar que ambos compartían en un lujoso condominio en el municipio de La Calera, cerca de Bogotá, Colombia, los cuerpos presentaban heridas de arma punzo cortante, las posiciones de los cuerpos y una <carta suicida> encontrada en la que el estilista pedía perdón y decía «no puedo más», generaron las primeras hipótesis de las autoridades, asumiéndo el caso como «homicidio-suicidio», teoría que poco tiempo después fue deshechada debido a las evidencias entre estas, que Mauricio había sido forzado a escribir la nota antes de morir.
Un homicidio muy mediático, tal vez el homicidio mediático más entrañable y escandaloso de los últimos tiempos en América latina. Conocido ya como «Caín», el asesino de su hermano famoso en Colombia.
Jhonier Leal acabaría con la vida de su hermano, de su exitoso hermano y también de su madre. Mauricio Leal era un joven emprendedor, fue conocido como el niño genio, se habría ganado ese apelativo y había dolido a la sociedad como duele ahora, solamente imagina a un joven que inició su trayectoria como ayudante de peluquería y si colocarse en las esferas de la sociedad popular es ganarse la confianza de la gente.. Imagínate llegar a las grandes esferas en donde se encuentran los personajes, la política, los artistas, las actrices, los actores, los cantantes que buscan con soberbia, que tienen vanidad, pero esa soberbia y esa vanidad forma parte de un producto y con toda razón, porque trabajan en ello, porque su producto son ellos mismos, porque mercadológicamente hablando, siempre tienen que estar en óptimas condiciones, con una imagen impecable, Trabajan en ello, ahí es donde entra Mauricio, para otorgarle a toda esa gente con talento la facilidad de que se sientan seguros, con una apariencia, pero llegar ahí y mantenerse, es justo la fortaleza de este genio, de de este hombre emprendedor, que finalmente la madrugada del 22 de noviembre del 2021 fue asesinado por su propio hermano.
Jhonier Leal habría estado en casa, en una zona residencial cerca de Bogotá, en Colombia, donde vivía Mauricio con su madre.
Mauricio y su madre Marleny habrían estado el domingo como cualquier día. Desafortunadamente Jhonier habría estado en la noche preparando el homicidio.¿Y cómo es que lo prepara? Porque de acuerdo a la fiscalía se sabe que durante cuatro meses, habría estado preparando la forma para matar a Mauricio y a su madre.
Es terrible, hay testimonios, hay evidencias de que Jonier entró por la parte trasera de la propiedad, a la habitación de su madre, por un ventanal. Según la fiscalía habría sedado a su mamá para después lesionarla con un arma punzo cortante, sedada, para no mirarla cara a cara con la cobardía de matarla mientras estaba inconsciente, arrastró su cuerpo por unos pequeños escalones hacia la habitación de Mauricio y con la misma arma blanca (un cuchillo) acabó también con la vida de su hermano,
Solo que en este caso de una forma lenta, la muerte más lenta en donde él realizó un vídeo grabando a su hermano, grabando a su hermano, en el que hizo ver que él se estaba quitando su propia vida.
En efecto la primera hipótesis de la Fiscalía de Colombia, fue el suicidio, en esa teoría se narra que de acuerdo a la posición de los cuerpos, y con una carta suicida se mostraba que Mauricio Leal habría sido homicida y suicida, había matado a su madre para después matarse él, pues vaya hipótesis que duró por cierto poco tiempo.
Las evidencias eran claras. La gente no se haría esperar y haría lo propio y mediante las redes sociales declarando una y otra vez que el sospechoso era Jhonier, el hermano envidioso.
Así fue el hermano envidioso, el que se llena de rabia mientras Mauricio se llena de éxito. ¿Qué dolor puede tener, qué ardor puede tener una persona para acabar con todo? Y mientras la gente veía muestras, evidencias de lo incongruente, yo que escribo esto ví otras cosas más dolorosas, el rostro de una mujer con una mirada que se quedó en el limbo, con los ojos ante la desgracia de su hijo, con la boca abierta de haber exhalado su último suspiro en manos de quien amaba de su propia sangre y a solo unas cuartas del hermano, a quien apuñaló lentamente y grabándole un video, mientras lo hacía declarar. “Me he encajado varios cuchillos… Nadie sabe de nadie” Pero en la parte final de ese clip aparece una frase donde dice – ¿qué más hago? -Y en este video, que por cierto llegó a México hasta el 2024, genera impotencia también, más aún para la sociedad en Colombia, porque tres años, un video que había sido oculto, que estaba guardado, que la fiscalía tenía en su poder un teléfono ya no encriptado, pues obviamente ese video tuvo que haber formado parte de las evidencias, no por tres años. Incluso la sociedad en Colombia llegó a cansarse de este caso, argumentando que se trataba ya de una cortina de humo para fines políticos y con toda la razón, pues no se hablaba de otra cosa en Colombia. Tres años después llega a México en 2024 y aquí, que somos muy mal pensados, te confieso que cuando yo vi el video en donde Mauricio se destapa quitándose la sábana y mostrando su abdomen al punto de la terrible hemorragia por apuñalamiento, definitivamente no sólo ves las sombras que están en la cabecera, que por cierto tiene unas alas de ángel, que eso es lo que veía toda la gente, el movimiento en la cabecera de unas sombras que si bien no estaban totalmente claras, pero se veía que había una tercera persona en esa habitación, que más tarde confirmado estaba que era Jhonier. Pero no solamente eso, sino que ves la carta en las redes ya tomando la investigación, una carta absurda. Seamos honestos, aquí en México existe una tendencia terrible, las estadísticas hablan de suicidios elevadísimos, muchísimo suicidio al año y eso te permite tener en cierta forma conocimiento de algunos patrones. No es una regla, pero hay gente que se suicida sin más ni más, sin dar señales de nada, también. hay gente que se toma su tiempo y lo practica una y otra vez hasta que lo consigue, finalmente se suicidan y hay gente que si va a tomar una despedida a través de un documento, de una carta, deslindando de responsabilidades a quienes corresponda, pues escriben con tiempo la carta, lo hacen conscientes, incluso algunos usan hasta sus sobres para guardarlas y ponerlas en algún lugar. No como sucedió con Mauricio, que de pronto ya con los minutos a cuenta regresiva escribe una carta en donde hereda y decide que, “por favor mis bienes pasen a mis sobrinos, a los hijos de mi hermano y mis propiedades queden en manos de mi hermano con amor”. todo eso escrito en una letra, evidentemente al borde de la muerte, pareciera como si lo hubiera escrito sosteniendo la pluma con el puño.
Es que un foco rojo tan contundente, una declaración obligada, presionada y vaya, todo eso para que pareciera que se trataba de un homicidio, suicidio.
La fiscalía no tardó en investigar, Jhonier había entrado por un ventanal, sedó a su mamá, la apuñaló, la arrastró por las escaleras, pero dejó unas gotas de sangre que no limpió. había eliminado las evidencias con jabón y agua, pero no hay crimen perfecto y dejó unas ligeras manchas en las escaleras, también existen unas manchas que encontraron los peritos en la recámara del propio hermano, de Jonier, ahí en el lavabo, unas diminutas gotas pero la evidencia suficiente.
Por supuesto que en tanto que se realizaba esta investigación, Jonier se estaba dando aires en las entrevistas que otorgaba, como el que va remando, escapando del fuego, así otorgaba una y otra y otra entrevista, sin victimizarse, simplemente lamentando la partida de su hermano y su madre y fácil de creer por la entereza con la que se expresaba, resignado. Sin embargo, llamó mucho la atención que él estaba al pendiente de lo que la gente decía, porque él mismo se defendía, deciendo
“Yo no entré por la ventana trasera, yo no tenía que hacer eso, la gente dice y la gente dice, yo no le debía dinero a mi hermano, mi hermano no me daba dinero, yo no le tenía envidia”
Pero también resaltó que en una de esas entrevistas, portaba vestido la chamarra de Mauricio Leal, de su hermano, con qué carácter, con qué descaro, vistió la casaca blanca que Mauricio Leal había vestido en algunas otras ocasiones. No había duda, era esa y la gente lo notó, el tiempo les dió la razón, una y otra prueba, con las cámaras de videovigilancia y la gente insistiendo en que el sospechoso principal era su hermano.
En las cámaras de videovigilancia de la zona del conjunto residencial lujoso donde vivían, pues obviamente se ve que la única persona que entra y sale el domingo y el lunes es Jonier, más que suficiente. Él habría utilizado la madrugada para acabar con la vida de su hermano y de su madre.Y hay muchas cosas que quedan en la impotencia de la sociedad, el tiempo principalmente,
