Descendiente de Bruja
Descubrió que en su familia existió una bruja
La llamada «Caza de brujas» en Europa se desarrolló entre los siglos XV A XVII, si bien, ahora sabemos que esa época la sociedad estuvo plagada no precisamente de brujas o hechiceras, más que eso la sociedad estuvo infestada de misoginia, clasismo, perversión e impunidad, todo por parte del clero.
Seguramente hubieron muchas historias desgarradoras, miles sin contar, que arrastraron
vidas inocentes, acabaron con familias completas, aún mencionar que solo fue cacería de brujas es poco ambicioso, ya que en cada circunstacia, en cada persona existian familias completas, tratando de proteger a las víctimas, en muchos casos incluyen también hombres, adultos mayores, niños y un gran número de mujeres acusadas de practicar la brujería.
En pleno siglo XXI, surgió un interesante testimonio, se trata de una mujer que decidió salvar la imagen de un familiar, alguien de sus ancestros, es decir del árbol genealógico de su familia dirigiéndose hacia las ramas más centrales para encontrarse con que una pariente de ella, la sorpresa fue que descubrió que su familiar había sido bruja, hechicera y que fue quemada en la hoguera.
Durante los años 1550 a 1650, la Europa medieval fue sede de acciones aberrantes por parte del clero hacia mujeres que según ellos eran adoradoras del «diablo» en estos años en los que estuvo en todo su auge acabó con la vida de muchas personas. Los temas estaban centrados en la magia, adivinación, hechicería, pero mucho la herbolaria ya que muchas de ellas ejercían la práctica medicinal para ayudar a otras mujeres cuando tenían labor de parto y por ello eran consideradas brujas.
Algunas otras por tener actos sexuales con sus parejas fuera del matrimonio fueron acusadas de tener actos lividinosos y sexuales con el diablo.
La palabra «bruja» viene del siglo XIV en Alemania, porque es ahí
donde se encuentran las más antiguas localidades y sobre todo apariciones de la palabra
bruja que en tecnicismo se escribe EXE. En Suiza la palabra bruja aparece en los
Frebreluggen que son libros de delitos, como lo ha demostrado Oliver Landolt.
En Lucerna La palabra bruja aparece por primera vez en 1402, desde ese año es considerada un delito.
Bernard Krammer empieza a dedicarse genealogía, iniciando con su propio árbol genealógico, Bernard cuenta que buscando la genealogía de sus ramas, se topa con que su abuelo fue
tristemente flagelado y asesinado en medio del Holocausto y platica su testimonio en el que, visitar la tumba de su abuelo fue una de las experiencias más
crueles que pudo tener en su vida, Bernard platica que en 2001 pasó cinco años para llegar a
esa fecha, al 2001, y encontrándose finalmente con el lugar donde yacían los restos de
su abuelo..
<<Seré breve, dice Bernard, mi abuela era judía, tuvo mucha suerte de sobrevivir a su tiempo, mis bisabuelos no tuvieron esa suerte>>
En estos más de cinco años, he logrado localizar un lugar donde finalmenete yacen los restos de mi abuelo, después de más de seis décadas de su muerte, encontré una fosa común muy cerca de Berlín, fue una experiencia que marcó mi vida y mi ser profundamente.
Pasé dos horas allí mirando su tumba, incluso mientras lo estaba buscando, estaba
pensando en las cosas horribles que mi abuelo pudo presenciar y el dolor de su trágica
muerte.
Él tenía 15 años cuando esto sucedió, cuando encontró datos precisos de sus abuelos y sus bisabuelos, pero resulta que un día se acerca a su esposa y empiezan también a investigar el árbol genealógico de su querida Ulla, y se encuentran con un dato sorprendente, un nombre que les llama mucho la atención, el nombre de una mujer que fue acusada de brujería, que fue flagelada, que fue torturada y a la que finalmente le quitaron la vida, pero de una forma
cruel, porque además se habla de que fue decapitada. Esta mujer pertenece al árbol
genealógico de Ula, esposa de Bernard. Se trata Margaret Krevetsiek.
Margaret Krevetsiek fue arrestada y acusada de conjurar y de intentar dar enseñanzas de sus trucos, La acusación más grave que tuvo fue que una mujer estaba aprendiendo trucos
de ella en 1653. Tuvo que confesar y aceptar sus delitos, Margaret confesó bajo tortura, bajo el yugo de una horca, de golpes, de abuso sexual y la amenanza de ser decapitada por lo que termina aceptando su culpabilidad.
Después de consumarse el mayor castigo, el domingo 10 de agosto de 1653 Margaret fue quemada en la hoguera y como concesión las autoridades permitieron se decapitara primero, pero más adelante, se investigaron las causas del por qué llegó ella a esta triste confesión y resulta que esta mujer había sido acusada por su propio hijastro, un niño de solamente seis años, a quien ella castigó con una paliza y que él no soportó y en el odio y desasosiego fue y la entregó a las autoridades.
Las autoridades que llevaron a cabo el proceso en contra de Margaret pertenecían a lo que hoy sabemos que es un museo, entonces conocido como «La casa del alcalde de las brujas».
«La casa del alcalde de las brujas» tuvo orígen por un cazador de brujas que vivió ahí en el siglo XVII y fue quien supervisó hasta el último de los juicios en contra de las llamadas hechiceras o brujas, se trataba de un hombre que comenzó en 1928 asesinando y flagelando a las mujeres que daban indicios de practicar cualquiera de estos delitos. Más de 200 mujeres fueron quemadas en la hoguera, algunas de ellas previamente decapitadas.
Margaret Krevetsiek pertenecía a la cadena familiar de Ulla, tuvo que confesar delitos que
no había cometido y pasaron 350 años para que un día la inquietud de Bernard Kramer sobre la genealogía lo llevara junto con su esposa Ulla a este importante descubrimiento, Bernard era en un agente de policía retirado y aficionado a los orígenes que constituyen un árbol genealógico y descubre, mientras está investigando el propio, que su
esposa Ulla también estaba relacionada con un pasado tormentoso y con el apellido Krevetsiek.
La idea fue de Ulla, diciéndole a Bernard, <<tenemos que descubrir qué es lo que aparece con tu árbol genealógico y cuando encontramos que teníamos una supuesta bruja entre nuestros antepasados, me quedé inmediatamente sorprendida>>
Ulla simplemente se concretó a decirme, pobrecita. Mi esposa de inmediato pensó,
tengo que investigar y hacer algo, porque sabíamos por la escuela que habían ocurrido
ya demasiadas injusticias en la Europa durante esos años, en la Europa medieval.
Krevetsiek murió, pero nosotros tenemos que hacerle justicia, no solamente porque es
integrante del árbol genealógico de mi esposa Ulla, sino porque hay demasiadas
injusticias como las hay en cualquier otra eventualidad y en cualquier otra guerra u otra
batalla que ha sido perdida injustamente por la gente más inocente.
Y estaremos citando al Holocausto o aquí en México «La Guerra Cristera, «La Primera y
Segunda Guerra Mundial» o cualquier otro evento en donde es más la gente inocente la
que carga con todos los pecados verdaderos de las autoridades. Y bueno, pues en 2012,
solamente 350 años después, presentan ambos, Ulla y Bernard, una solicitud formal al
ayuntamiento para pedir la exoneración de Margaret Krevetsiek.
Cinco años después hemos logrado limpiar su nombre y no solo el de ella, el de la mayor
parte de víctimas de los juicios de brujería en aquella ciudad.
Para nosotros era importante limpiar su nombre porque es una injusticia, especialmente
ha sido cometida por el Estado, lo que te mencionaba hace un momento, es algo que
debe de corregirse. Eso fue lo que dijo Bernard, cada caso que sale a la luz evita más
injusticias, esa es la teoría que tienen los Krammer.Los juicios de Salem en Massachusetts, por ejemplo, en el siglo XVII, fueron demasiado conocidos y de hecho hay bastantes películas relacionadas con eso porque a todos nos encantan las cuestiones esotéricas, hechiceras o por ejemplo lo de las brujas de Salem y las películas y todo lo que nos haga saja de terror en esta época y no nos ponemos a pensar de dónde provienen esas trágicas historias que ya son tradicionales.
Pero bien, los juicios de Salem en el siglo XVII son conocidos en todo el mundo, pero en
realidad en Europa fue donde al final de cuentas se mostró el escenario más vil de todas
esas víctimas que murieron en la horca o que murieron quemadas, algunas vivas. En
Salem, 200 personas fueron acusadas de brujería. En la Alemania actual, el número de
ejecuciones que se estiman ahora fueron más de 25.000. La casa del alcalde de Brujas,
que se encuentra en Lemgo, se ha convertido ahora en un museo y a la gente le encanta
ir a visitarlo.
Se estima entre 40.000 y 60.000 personas que fueron ejecutadas en esa época, solo al
final del siglo XVII y que inició todo esto en el siglo XVI. Hay una persona de nombre
Hartmut Hegeler, que es un pastor protestante de la ciudad de Una y que ha estado
ayudando a la gente a exonerar a cientos de víctimas con la misma idea, con la idea de
que se pueda limpiar la memoria de tantos seres que murieron víctimas para él,
técnicamente de misoginia. Lo dice el mismo Hegeler, <<para mí es una cuestión de
legitimar mis creencias>>
<<Lo hago porque el mismo Jesucristo fue acusado y torturado, fue ejecutado injustamente.
Los cristianos decimos que era inocente. Dime si o no había injusticia con el propio
Jesucristo>>
Estas víctimas de la cacería de Brujas tuvieron que pasar por las mismas cosas. Fueron
acusadas, torturadas y ejecutadas, algunas de ellas siendo inocentes, si no es que más
de lo pensado. Así que él emprende toda esta lucha y ayuda a exonerar a mucha gente
de esos terribles, «pecados».
Hegeler narró el caso de una niña de nueve años. Imagínate nada más. Es un caso que me impresionó, dice Hegeler.
Era una niña de nueve años que fue ejecutada en mayo de 1630 en la aldea norteña de
Oberkirchen. Cristin había comenzado a decirle a la gente que ya era una bruja y que ya
había participado en un aquelarre e inclusive había bailado en la noche el baile nocturno
con el diablo. Y que no solamente ella era sola, sino que también había 15 personas con
ella y se atrevió a dar todos los nombres.
Seis mujeres, otras niñas y destaca el nombre de Grett Hallman. Mucha gente, después
de que esta niña salió a las calles a buscar esa justicia, prácticamente en una forma
kamikaze, no puede más que decir que pues, ¿por qué lo hizo si es una niña? Lo que
sucede como consecuencia es que viene la tortura y obviamente una tortura previa
psicológica por ser una niña, pero al final de cuentas también le quitan la vida. Las
autoridades la arrestaron y torturaron a ella y a las 15 personas que ella nombró.
Luego se fueron durante tres meses a localizar a las personas una por una. Al final, 58
personas de 15 que ella nombró, 58 personas fueron quemadas en la hoguera, incluidas
ella, Cristin, su madrastra, su madrastra Grett, la que te mencioné, y sus padres.
Desafortunadamente no se sabe si a la niña la estuvieron torturando viendo cómo
mataban y decapitaban a esas 15 personas y al resto más, o si solamente se
concretaron a matarla ella, pero lo que sí se sabe es que tenía nueve años y a este
hombre le impresionó la historia tanto.
Él dice, sólo me imagino cuánto se asustaría cuando le mostraron los instrumentos de
tortura, así lo dice el padre Hegeler, sólo de pensar que la niña haya visto lo que toda la
gente podía ver en cualquier momento porque estaban expuestos al público.
Desafortunadamente los equipos, los aparatos de tortura eran el día con día para que la
gente supiera lo que le podía suceder y esas prácticas y esas torturas las llevaban a
cabo desde un uso común que se llamaba la inmersión, que era cuando sentaban a la
bruja acostada y la ataban a una silla y la sumergían en el agua. Después de sentir que
se ahogaba, pues obviamente al perder la vida, si flotaba la consideraban una bruja y
que había utilizado su magia para mantenerse a flote, pero si no flotaba, era porque era
una inocente que había muerto involuntariamente.
El caso es que acababan con ellos y en esas prácticas también en los interrogatorios
posteriores llegaron a utilizar formas brutales de castigo como el potro y mantener a
alguien despierto durante días. Imagínate nada más días y días sin poder dormir a punto
de volverse locos. Hay otra parte de castigo, una forma bastante cruel que es la que yo
te mencionaba y de eso también tenemos una historia muy cruel. Estamos hablando de los actos sexuales que decían ellos que profesaban las mujeres con el diablo. Hay un monumento que conmemora a 380 mujeres de comunidades locales porque fueron encarceladas, torturadas y ahorcadas y destaca mucho el nombre de una mujer de nombre Lila Ady, la única imagen de ella aparece con un manto blanco en su cabello como todas que usaban velos, velos tejidos, velos blancos o velos negros porque así era la propiedad y el tributo que le rendían a la religión, eran demasiado pulcras. Esta mujer Lila Ady tenía aproximadamente 68 o 70 años, un rostro lleno de cansancio, de arrugas, blanco no por la piel sino por la palidez de no tener ni siquiera la luz del día cerca de ella, imagínate nada más.
Esta mujer estuvo encerrada muchos años y ahora se habla de un monumento en el sitio
de entierro de ella, de Lila, porque fue una mujer que murió en prisión en 1704 mientras
se veía obligada a confesar cómo había realizado sus actos sexuales con el propio
demonio, con el diablo. El rostro de Ady ha sido gracias a la tecnología recreado con la
ayuda de computadoras y por un equipo de investigadores dirigidos ahora por el doctor
Christopher Ryan de la Universidad de Dundee, quien dio más o menos las
características de esta mujer. Hicieron la reconstrucción que llega a toda la cara a su piel
y en las palabras de Christopher Dundee dice de pronto en su mirada siento que estoy
viendo a alguien que ya conozco.
Esta mujer Lila Ady murió tristemente después de también obviamente la tortura pero
ha sido una campaña la que ha logrado emprender y obviamente también han exigido el
perdón de las autoridades. Quieren el perdón, quieren que pidan disculpas en todas esas
comunidades y ahorita ya exigiendo también un monumento dedicado a los condenados
en virtud de la ley de la brujería de Escocia porque fue una ley de la brujería que
clasificó como delito cualquier acto y estuvo en vigor de 1563 hasta 1736. Más de dos
siglos ejerciendo lo peor en contra de la gente que daba cualquier signo de practicar
brujería.
Esta situación de tener actos sexuales con el diablo no es más que el encontrarse una
mujer que pudiera estar semidesnuda o practicando sexo con alguna persona fuera del
matrimonio y las llamaban pecadoras de lujuria insaciable. Los hombres también fueron
juzgados y ejecutados por brujería pero fue el porcentaje menor. La mayoría de las
víctimas, es decir, más del 85% eran mujeres.
Este pecaminoso acto sexual con el diablo fue manifestado en un libro que se llamaba El
Maleus Maleficarum. Un manual de cacería de brujas del siglo XV que pone mucho
énfasis en el apetito sexual insaciable de las mujeres, describiéndolas como criaturas sin
moderación, en la bondad de vicio. Así de crueles y así de sádicos han sido los castigos y
ahora, gracias a la labor que emprendieron estas dos personas, tanto Bernat como Ula,
podemos decir que afortunadamente hay tanta justicia que se han logrado limpiar las
memorias de tantas y tantas personas.
Y ahí es como recuerdan ellos haber salvado la memoria de cerca de cuatro mil personas
que fueron acusadas y que fueron ejecutadas en algunas ocasiones bajo el mando del
rey James VI, ese hombre consideraba que era un sabio y se consideraba un experto en
brujería todo un caballero aparente con fleco y cuello largo, con un gran sombrero,
tejido y bordado. Este hombre escribió un libro llamado Demonology, en 1597.
Mitchell recuerda un caso particular que la conmocionó, era una mujer de las islas de Orkney, frente a la costa noroeste de Escocia había reñido con un pescador en su aldea, Un día él estaba en el mar cuando ocurrió una tormenta dijo que cuando fue al mar vió una foca y creyó que la foca lo miró y pensó que la foca era ella, esa mujer con la que había discutido, entonces sale del agua y lo empieza a promover y la gente le cree. Y así es como todos concluyen que esta mujer tenía la capacidad de transformarse en diferentes animales,
por las palabras de este hombre decidieron ejecutarla.
En Alemania el padre Hegeler, dice que algunas autoridades locales se han negado a otorgar el perdón porque mancha la reputación de sus pueblos, recordemos que hay lugares en Alemania que tienen nombre de brujas, ciudades incluso, y hay muchos templos que la gente propicia y promueve, no solamente por un buen turismo sino también por las historias que nos han contado de las brujas.
Y es algo que pues nos apasiona. Los líderes religiosos, por su parte, ya han expresado
su simpatía por la causa, solo que creen que la iglesia debe de concentrarse en los
problemas actuales y no en los problemas de nuestros ancestros, ellos juzgan que la
iglesia se debe de preocupar más por la pobreza.
En Irlanda continúan abogando por que se instale una placa en honor de las víctimas de
los juicios contra las mujeres que supuestamente practicaban brujería. Para Mitchell, los recientes movimientos a favor de derribar las estatuas de personas vinculadas a la esclavitud son una señal simplemente de que la gente se preocupa porque quiere conocer de la historia, se preocupan por estar representados adecuadamente en la actualidad y no quieren que se les venda una historia de otra época.
Para los Krammer, Bernard y para Ulla, el haber conocido el destino de su antepasado revivó un exámen de conciencia que comenzó cuando él tenía 15 años y contó la historia de su abuelo que había muerto en el holocausto. Pero en palabras de él solamente hay orgullo
por saber que ayudó a mucha gente a salir del anonimato, del entierro, del olvido, de la masacre y de ser víctimas de un atropello y sobre todo porque les quitaron la vida.
Y tú ¿qué tanto estás dispuesto a hurgar
en tus antepasados?